
Imagino que así ha de sentirse cuando un padre o un profesor siente orgullo por su hijo o alumno. No, mentira. No podría imaginar tal cosa. Ni siquiera imaginar. No es mi hija y tampoco soy profesor. En todo caso: Imagino que así es como se siente cuando un amigo o colega logra un objetivo más en su camino. Esto, en todo caso, más que imaginarlo, lo siento. Ahora mismo. Ahorita. Se trata de Belem, "La-leída", Salazar. Que le han publicado una serie de divertidos y desconcertantes tuits sobre la Nada en la monada y mínima de Bonsái.